El gobierno de Corea del Sur le advirtió al de Corea del Norte que debe abstenerse de atacar un gigantesco árbol de Navidad instalado cerca de la zona desmilitarizada entre los dos países.
Varios observadores creen que el árbol puede ser visto como una "provocación" por parte del gobierno de Pyongyang, pues en Corea del Norte no se celebra la festividad religiosa.
Pero la prensa surcoreana citó este martes al ministro de Defensa surcoreano, Kim Kwan-jin, afirmando que cualquier soldado norcoreano que dispare contra del árbol será "borrado".
Las tensión entre las dos naciones se mantiene alta desde el bombardeo el mes pasado de una isla surcoreana, a la que Corea del Norte atacó en protesta por ejercicios militares de Seúl.
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